La pandemia de COVID-19 ha impactado de manera importante al mundo. Según la Organización Internacional del Trabajo (OIT), la población joven ha sido de las principales afectadas de manera desproporcionada en cuanto a los efectos socio económicos de la emergencia sanitaria.
En SERAJ, del 27 de abril al 5 de mayo de 2020, levantamos una encuesta a las personas jóvenes que participan en nuestros programas, para conocer el impacto que ha tenido la contingencia sanitaria por COVID-19 en ellas y en sus familias. A continuación, presentaremos algunos hallazgos derivados del análisis de la información que arrojó la encuesta.
Del total de personas jóvenes que respondieron a nuestra encuesta, 51% se identifican como mujer, 48% se identifican como hombres, y 1% se identifica con otro género. Las personas encuestadas pertenecen a cinco proyectos que tiene activos SERAJ: Jóvenes con Rumbo, Crea Tu Espacio, Camino a la Paz, Jóvenes con Finanzas Sanas y Formando Futuro. Estos proyectos se encuentran en las cuatro sedes en las que SERAJ tiene presencia: Ciudad de México, Estado de México, Nuevo León y Puebla.
La brecha digital y el inequitativo acceso a dispositivos electrónicos e internet son una problemática latente en México. En el distanciamiento social y en la educación o trabajo a distancia que estamos viviendo, es necesario que todas y todos tengan las herramientas tecnológicas necesarias para. En la encuesta que levantamos, en temas de conectividad, del total de personas entrevistadas:
31.15% declararon tener computadora de escritorio en casa,
46.37% declararon tener una computadora portátil en casa que sirva,
93% de las y los jóvenes tienen en casa un celular con posibilidad de acceso a internet. Del 7% que declaró no tener celular con acceso a internet, 5.5% de este porcentaje, forman parte del programa Jóvenes con Rumbo.
En total, 5% de las y los jóvenes no tiene ninguno de estos tres aparatos electrónicos en sus casas.
De igual manera, se ha alertado sobre el impacto en la salud mental de las personas ante el confinamiento por la emergencia sanitaria que atravesamos. En ese sentido, entre las actividades que reportan que hacen las y los jóvenes y que tienen impacto en la salud mental son las siguientes:
El 76% de las y los jóvenes dedica por lo menos un día a la semana a hacer ejercicio en su casa; por otro lado, el 24% declara no dedicar ningún día a esta actividad. Sin embargo, de este 24%, el 4% declara que aunque no hace ejercicio al interior de su casa, por lo menos 1 vez a la semana sale a caminar o hacer ejercicio a la calle. Es decir hay un 20% de jóvenes que no realizan ejercicio, ya sea en su casa o en exteriores.
57% de las y los jóvenes declara dedicar de 1 a 3 días de su semana a la lectura, ya sea en libros, en artículos o en revistas.
En general, la actividad que realizan con mayor frecuencia es ver videos, series o películas en internet, ya que el 55% declaró dedicarle entre 4 y 7 días de su semana. Comparablemente, solo el 6% declaró nunca realizar esta actividad a lo largo de la semana.
Dentro de las actividades que realizan, cuando desagregamos los datos por género, observamos que las mujeres jóvenes en casa asumen los roles tradicionalmente asignados a su género. Por ejemplo, el 55% de las mujeres declara que todos los días de la semana realiza tareas del hogar como lavar trastes, trapear, barrer y limpiar, entre otras. De manera contrastante, el porcentaje de hombres que diariamente realiza tareas del hogar disminuye a 35%. Mientras que el 1% de las mujeres declara que nunca realiza tareas del hogar, en hombres, este porcentaje se eleva al 6%. En suma, las mujeres que no dedican ningún día o solo uno de la semana a realizar tareas del hogar, suma apenas el 3%, mientras que en hombres, esta suma de porcentajes lo eleva al 12%.
En cuanto al estado de ánimo de las y los jóvenes durante el confinamiento por la emergencia sanitaria, se les preguntó qué tan frecuente han experimentado alegría, enojo, tristeza, disgusto o incomodidad y miedo a partir del confinamiento. Evaluaron la frecuencia en un rango del 1 al 5, donde 1 es nunca y 5 es siempre. En ese sentido, las emociones que más han experimentado son alegría, con un promedio de 3.47; enojo, con un promedio de 2.89; y tristeza, con un promedio de 2.72. Adicionalmente, 62% reporta haber experimentado miedo, 76% ha experimentado tristeza, 80% ha experimentado disgusto e incomodidad, 87% ha experimentado enojo y 94% ha experimentado alegría.
Los principales detonadores de su estado de ánimo son: en primer lugar, no poder realizar sus actividades habituales (deporte, pasatiempos, amistades, escuela, trabajo, etc); en segundo lugar, estar encerrados/as en sus casas; y en tercer lugar, la situación económica. En el tema de la situación económica que afecta en su estado de ánimo, es importante resaltar que 46% de las personas encuestadas declararon no tener ingresos suficientes y 22% menciona que necesitaría de mayor apoyo económico o en especie para sobrellevar de mejor manera la contingencia.
Por último, las y los jóvenes perciben un aumento de la violencia en sus casas, 15% lo ha presenciado a través de conversaciones tensas, 11% a través de gritos y 9% a través de peleas.
Los resultados de la encuesta nos permitirán conocer mejor la situación que atraviesan personas jóvenes ante la emergencia sanitaria por COVID-19, esto a su vez nos da mayores herramientas para mejorar nuestros procesos de intervención con ellas y ellos durante la contingencia y también una vez que pase.